Si tienes dudas acerca de cómo se debe escribir «exige o exije» en este artículo vamos a darte la respuesta correcta para que no tengas más confusión. Las palabras con el fonema “g” cuando van acompañadas de la vocal “e” tienden a confundirse ya que se pronuncian igual que una jota, derivándose en una manera de redactar descuidada.
Otros ejemplos de dudas del mismo tipo son «cojer o coger», «dije o dige», «protejer o proteger» y «tarjeta o targeta», entre otros.
Exije
La palabra ‘exije‘ es incorrecta al no ser reconocida por el Diccionario de la Real Academia Española (RAE), por lo que no forma parte del idioma español. Si ves frases como ‘el gobierno exije un impuesto muy alto’ o ‘mi jefe me exije más de lo que puedo dar’, debes saber que están incorrectamente escritas.
Exige
Esta sí que es la manera adecuada de redactar según la RAE, poseyendo diversos significados:
Requerir un derecho asociado a una persona.
- Ejemplo: Exige que le devuelvan el dinero, ya que el producto está defectuoso.
Referido a una cosa; pedir algo que venga dado por las características del momento.
- Ejemplo: Exige a sus soldados que apunten mejor al enemigo.
Recibir mediante institución pública dinero u otro tipo de tributos.
- Ejemplo: Hacienda exige el pago del impuesto cada año.
Cómo se conjuga el presente del verbo exigir
De forma de comprender bien cómo escribir las conjugaciones del verbo exigir, te mostramos su conjugación en presente de indicativo:
- Yo exijo
- Tú exiges
- Él exige
- Nosotros exigimos
- Vosotros exigís
- Ellos exigen
¿De dónde proviene el verbo «exigir»?
El verbo en castellano «exigir» proviene de la forma verbal en latín exigere, cuyo significado es «discutir» o «reclamar».
Sinónimos de exige
Estos son algunos de los sinónimos más habituales para el verbo «exigir»: pedir, solicitar, reclamar, reivindicar, requerir, pretender, necesitar, precisar.
Cómo se dice “exige” en otros idiomas
Refresca tu memoria y aprende nuevos idiomas con las diferentes formas de decir esta palabra:
- Inglés: requires
- Francés: exige
- Portugués: exige
- Italiano: richiede
- Alemán: erfordert
Soy catedrático de Literatura Española en la Universidad de Granada, ciudad en la que nací en 1968.
Hice el bachillerato de Ciencias; a los catorce años es difícil tener una orientación definida. En Preu me pregunté: “¿qué hago yo aquí, si a mí lo que me gusta es la literatura?”, y me pasé a Letras. En segundo de carrera la vocación se afirmó con la conciencia clara de que solo podía dedicarme a la investigación y a la docencia en Literatura. Pero mi preferencia estaba, no por la Contemporánea, sino por la literatura de los Siglos de Oro. Ya estaba iniciando la tesina sobre los cancioneros de Amberes de Jorge de Montemayor, cuando asistí al curso de José-Carlos Mainer sobre la “Edad de Plata”. Aquello removió mi fondo de lecturas juveniles, y pude verlas a una nueva luz. Cambié a Montemayor por Pérez de Ayala, y fui adentrándome en esa época fascinante: el “fin de siglo” y los treinta primeros años del XX.
No abandoné la literatura de los Siglos de Oro; en la docencia siempre me he dedicado a esta época con verdadera pasión. En los más de cuarenta años que llevo en las aulas, siempre he asumido la docencia de los siglos XVI y XVII, con preferencia, este último. No hay nada, en mi profesión, comparable a tratar con detenimiento sobre el Quijote. Para mis colegas soy un investigador en Contemporánea; para mis alumnos, un profesor de Renacimiento y, sobre todo, de Barroco.